La práctica de la autocompasión, el aspecto del flujo compasivo haca nosotras mismas, implica “ser amable contigo mismo en medio del sufrimiento» y cómo?… «Abrazándonos a nosotros mismos tal como somos: con defectos y todo«… (Neff, 2015; Germer &Neff 2018)
El cultivo de la autocompasión es una oportunidad se ser más amigables con todo nuestro ser, cultivando cualidades como la fortaleza interior, la sabiduría y la amabilidad.
Entendida así la autocompasión, es posible diferenciarla del egoísmo, narcisismo, auto indulgencia y auto complacencia, realmente ser compasiva con nosotras es hacernos responsables por nuestra vida, con su luz y su sombra.
Por ejemplo, la autocompasión nos invita a abrir un espacio a aquello que puede resultar difícil, doloroso o que no deseamos y que forma parte de nuestra de experiencia; para integrarlo con calidez y aceptación. Así como también, nos moviliza a protegernos, motivarnos y tomar acción cuando es necesaria para el bienestar, lo que puede llevarnos a actuar con mayor fortaleza, cultivar la capacidad de poner límites, tanto a otras personas como a nosotras mismas. Podemos ir trabajando en la seguridad y coraje para tomar decisiones, aliviar nuestro sufrimiento y liderar nuestra propia vida.
Sus componentes son (Neff 2015):
- Amabilidad/ternura o bondad hacia uno mismo
- Atención plena o mindfulness
- Humanidad compartida, «Estamos todos juntos en esto»
La autocompasión implica la posibilidad de cultivar cualidades de amabilidad/ternura y al mismo tiempo valor, coraje y fortaleza interior.
En este video de Kristin Neff puedes profundizar, ella es la pionera y referente mundial en el estudio de la autocompasión.